Apostamos por un mayor protagonismo de las regiones para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.

Con la Directora General de Calidad e Impacto Ambiental, Matilde Basarán.

 

  Apostamos por un mayor protagonismo de las regiones en las acciones que se llevan a cabo para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda de Desarrollo post-2015 de la ONU.

Así lo he expuesto esta mañana en Bruselas, donde participo junto a la ministra Isabel García Tejerina en el Consejo de Ministros de Medio Ambiente de la UE, actuando como portavoz de las comunidades autónomas españolas en asuntos como la Agenda de Naciones Unidas post-2015, tema sobre el que ayer los ministros de Exteriores de los Veintiocho consensuaron una postura conjunta de la UE.

Asimismo, en el Consejo de Ministros se abordan hoy la revisión de la directiva de envases y residuos de envases para reducir el consumo de bolsas de plástico; el seguimiento y la verificación de las emisiones de dióxido de carbono del transporte marítimo; y la limitación de las emisiones procedentes de las instalaciones de combustión medianas.

He pedido que para potenciar el papel de las regiones se habiliten cauces efectivos de participación para los gobiernos regionales, con el fin de que tengan voz real y puedan ser en mayor medida copartícipes y corresponsables de las acciones que se llevan a cabo en sus territorios.

Además, he recordado que la Agenda de Naciones Unidas post-2015 contempla una propuesta de 17 objetivos de desarrollo sostenible en los ámbitos social, económico y medioambiental. Entre estos están los referidos a seguridad alimentaria y nutrición; agricultura sostenible; agua y saneamiento; energía sostenible; crecimiento inclusivo y sostenible; ciudades sostenibles; consumo y producción sostenibles; océanos y mares; biodiversidad y bosques, y degradación de la tierra

He defendido que estos Objetivos de Desarrollo Sostenible sean precisos, medibles, alcanzables y orientados a la acción, porque si no cumplen alguna de estas características será más complicada tanto la puesta en marcha de las acciones como el éxito de las mismas.

Reducción del consumo de bolsas de plástico.

Sobre la revisión de la directiva de envases y residuos de envases para reducir el consumo de bolsas de plástico, apostamos por que sean los Estados miembros los que opten por los instrumentos económicos más adecuados para alcanzar los objetivos de reducción en el consumo de bolsas de plástico, en forma de precios, tasas, impuestos, etc.

Asimismo, he reclamado que se vigilen que las medidas que se adopten para reducir el consumo de bolsas de plástico ligeras no desemboquen en un aumento global de la producción de envases.
 
Reducir las emisiones en transporte marítimo.

Por otro lado, en el tercero de los asuntos, el seguimiento y verificación de las emisiones de dióxido de carbono del transporte marítimo, el objetivo de la UE es establecer un sistema europeo de seguimiento, notificación y verificación de las emisiones de CO2 de todos los buques de más de 5.000 toneladas de arqueo bruto que lleguen a un puerto comunitario.

En este punto, he solicitado que se minimicen las cargas administrativas y que se agilice y simplifique la normativa. Para ello, he señalado que los trabajos deberían centrarse en las emisiones de CO2, el gas más relevante de efecto invernadero emitido por el transporte marítimo.

En cuanto a la limitación de las emisiones procedentes de las instalaciones de combustión medianas, consideramos conveniente que se retrase hasta 2025 la entrada en vigor de los valores límite de emisión que deben cumplir las instalaciones nuevas, plazo que pide extender hasta 2030 en aquellas con menor potencia -entre 1 y 5 MW-, con el fin de que los fabricantes de estos equipos se adapten con mayor facilidad a las nuevas limitaciones.